Nobel de la Paz sufrió una fractura vertebral en su agitada salida de Venezuela
La opositora venezolana María Corina Machado, ganadora del Nobel de la Paz, sufrió una fractura vertebral en su viaje clandestino para salir de Venezuela y llegar a Noruega la semana pasada.
Machado, de 58 años, recibió el galardón por su lucha por "una transición justa y pacífica" para recuperar la democracia en Venezuela.
Machado pasó a la clandestinidad poco después de denunciar fraude en las elecciones presidenciales de 2024, que dieron un tercer mandato consecutivo al presidente Nicolás Maduro.
Llegó a Oslo el jueves de madrugada, demasiado tarde para asistir a la ceremonia de entrega del galardón, que recogió su hija Ana Corina Sosa.
Su viaje fue el resultado de una operación rocambolesca denominada "Dinamita Dorada", según Bryan Stern, un excombatiente estadounidense que fundó una empresa para sacar a extranjeros de zonas peligrosas. La nobel -disfrazada y con una peluca- abandonó Caracas rumbo a una playa en el norte del país para abandonarlo en la precaria embarcación rumbo a Curazao para tomar un vuelo con escala en Estados Unidos.
Machado no se ha pronunciado directamente sobre su salida, más allá de que temió por su vida.
Y desde que llegó a Noruega dijo varias veces que deseaba ir a un médico.
"Por el momento, no se dará ninguna información extra", dijo la portavoz de Machado, Claudia Macero, al confirmar la lesión diagnosticada en el hospital universitario Ullevål, según el diario noruego Aftenposten, que reportó primero la noticia.
Su fractura no le impidió pasar por encima de una barrera para saludar a sus simpatizantes en la capital noruega, en su primera aparición pública en el país nórdico.
Maduro cuestionó su lesión. Machado "dice que tiene una vértebra rota, lo que tiene roto es el cerebro y el alma porque es una demonia, odia a Venezuela, te odia a ti", dijo Maduro en su programa de televisión el lunes de noche.
- "Riesgo real para mi vida" -
Los resultados del 28 de julio de 2024 en Venezuela no fueron reconocidos por Estados Unidos, la Unión Europea y varios países de Latinoamérica.
La líder opositora, que estaba inhabilitada, sostiene que Maduro le robó las elecciones a su candidato, Edmundo González Urrutia, y publicó en un sitio web copias de las actas de las máquinas de votación para probar su victoria. El chavismo desestima esos documentos.
Antes de su aparición en Oslo no había sido vista en público desde una protesta en Caracas contra la investidura de Maduro en enero de 2025.
Su salida de Venezuela se mantuvo bajo un estricto secreto. El fiscal general de Venezuela dijo el mes pasado a la AFP que Machado sería considerada "fugitiva" si abandonaba el país, donde es investigada por "conspiración, incitación al odio y terrorismo".
El ministro del Interior de Venezuela, Diosdado Cabello, desestimó la operación. "Es parte de la estupidez ilustrada de la oposición", dijo en una rueda de prensa el lunes. "Tratan de poner y adornar (...) para darle un carácter mítico".
Cabello dijo días antes de la ceremonia que Machado ya estaba fuera del país. El día de la premiación en Oslo insinuó que la Nobel salió con ayuda del gobierno chavista.
Stern contó al Wall Street Journal que la embarcación que debía sacarla del país estaba averiada. Era un viejo barco pesquero para evitar sospechas y tampoco ser confundidos con una narcolancha, en momentos en que Washington realiza bombardeos que han causado al menos 87 muertos en el Caribe y el Pacífico.
Cuando por fin logró zarpar, el GPS de la embarcación se dañó. Entumecida de frío y empapada, pasó a otro barco en el que se encontraba Stern para llegar a Curazao.
"Hubo momentos en los que sentí que había riesgo real para mi vida, y fue un momento también muy espiritual porque, al final, simplemente sentí que estaba en las manos de Dios", declaró Machado el viernes en Oslo.
R.Michiels--LCdB